Según el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales, en Argentina coexisten 182 programas sociales que abarcan a unas 25 millones de personas. Es decir, más de la mitad de los argentinos reciben algún tipo de ayuda por parte del Estado.
Los datos del Gasto en Servicios Sociales, muestran que el
gasto corriente en 2021 fue de $7.151.504 miles de millones y en 2022 tiene
aprobado $6.993.190 miles de millones.
Según el informe que publicó iProfesional, de los 182
programas vigentes, el 46% corresponde al Ministerio de Desarrollo Social de la
Nación, que coordina 84 planes sociales, en donde la mayor partida
presupuestaria lo tienen los programas de políticas alimentarias.
Por su parte, el Ministerio de Salud es el que tiene el 14%
de los planes sociales, uno de ellos es el Programa Nacional de Salud Familiar
y Comunitaria.
El Ministerio de Trabajo, en tanto, se lleva el 9% de la
totalidad de los planes, en donde la mayor partida corresponde al Programa
Potenciar Trabajo que además de tener un 1 millón de beneficiarios, tuvo 2
millones de inscriptos potenciales.
El Ministerio de las Mujeres con ayudas estatales como el
Programa Nacional "GENERAR", Programa Escuelas Populares de Formación
en género y diversidad "MACACHAS Y REMEDIOS, entre otros 10 más, se lleva
un 6% de todos los planes del estado.
Un 5% corresponde al Ministerio de Transporte con programas
como el Plan Estratégico para la incorporación de la Perspectiva de Género en
el ámbito de competencia del Ministerio de Transporte 2020-2023, un 3% a la
Agencia Nacional de Discapacidad (ej. Programa Federal Incluir Salud), otro 3%
pertenece al ANSES con los ya conocidas Asignaciones familiares, AUH,
Jubilaciones y pensiones no contributivas.
Por último, le corresponde un 2% al Ministerio de Relaciones
Exteriores y Culto con políticas como el Programa de Operativos Socio
sanitarios: Barrio Unido, entre otros.
Si se contemplan los datos de la Administración Pública
Nacional, se puede observar que el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación
otorgó a más del 50% de las personas que habitan el suelo argentino alguna
cobertura estatal en la pandemia.
Por su parte, la estructura de estos programas se encuentra
tan mal diseñada que no existen los incentivos suficientes para abandonar estos
planes.
En algunos casos, se pueden cobrar por mes dos salarios
mínimos sin necesidad de trabajar. No hay incentivos para abandonar este
esquema de asistencia.
Por ejemplo, una trabajadora adulta embarazada puede recibir
el plan potenciar de $16.500 sumado al bono extra que se recibe en abril de
$6.000, además puede cobrar unos $9.000 como ayuda social por su embarazo,
sumando así $31.500 mensuales.
Ahora, en una familia con dos hijos, pueden llegar a recibir
mensualmente $64.200 del Estado. De esta manera, se puede a llegar a sumar dos
salarios mínimos, pero aun así no lograrían superar los niveles de pobreza.

Comentarios
Publicar un comentario